lunes, 26 de abril de 2010


Fuimos uno. Somos y seremos uno. Juntos o separados, amando y odiándonos. Somos como un rompecabezas, encajando a la perfección.
Hasta nunca. Hasta siempre. Un alma dividida en dos.

domingo, 25 de abril de 2010


Miro a los costados, intentando distinguir entre la multitud tu rostro. Te busco aunque tu nombre, edad y cuerpo me sean indiferentes. Aún sin saber quién y cómo eres. Aunque todavía no existas para mi, estas ahí, dando vueltas.

Te busco, en realidad, por que que algún día voy a encontrarte.





domingo, 18 de abril de 2010

Try

Cambiaría si pudiera. Dejaría de esconder mis magulladuras y las mostraría para que todos vean quien soy: una mierda. Alguien que quiso ser y no pudo. Que lo intentó todo, y por más de las interminables caídas, sigue intentando.
A veces trato y muy pocas logro, de engañarme diciéndome que todo esta bien. Digo qué mañana va a ser igual o mejor a hoy. Me engaño, me miento, y lágrimas siguen cayendo ante desiluciones. Por que no cumplí mi palabra, no mejoré. Todo es igual. Siempre, viviendo en una eterna rutina.
Pero sigo prometiendo, ilusionando mis absurdas ganas de vivir.
Porque respiro, sonrío y siento. Porque soy feliz, por más de que los tajos y moretones no me dejen respirar tranquila.
Soy y seré yo, para siempre.





jueves, 8 de abril de 2010


Dejá de llorar. Limpia tus lágrimas, que ya nada es lo mismo. No te tengo lástima, porque aún algo de vos está en mi cuerpo.
Esto no es un adiós. No va a ser la última vez que voy a pensar en vos, y tal vez más adelante me arrepienta de lo que decidí.
Pero no llores por mí, no desperdicies tus lágrimas. No llores, porque no lo mereces.
Voy a estar feliz si sonreís. Todo va a ser igual, lo prometo.
Pero sólo te pido que no llores.
Por que cuando lloras, no pareces vos mismo, y eso me hace sentir miserable.

jueves, 1 de abril de 2010


Corro por un desierto que no tiene final. Corro por que algo me persigue, y lo siento respirar cerca de mi hombro. Creo que es la muerte, que reclama victoria.

La ignoro, sigo corriendo. El frío me congela los huesos, el invierno se hace presente. No me importaría morir si es contigo. Pero solo contigo.

Asi que sigo corriendo, y lo seguiré haciendo hasta que te encuentre.
Creo que solo entonces me sentiré en paz.